Cuando hablamos del enfoque sistémico la referencia obligada es la familia como un sistema total. Se toma como alusión única la Terapia Familiar y la Teoría General de los Sistemas, y se supone la necesidad de incorporar siempre en la consulta sistemas más amplios que el que se observa.
Pero darle a lo sistémico sólo el status de una teoría asociada a la Teoría General de los Sistemas y la Terapia Familiar – o lo sistémico-familiar-, es reducir el enfoque ya que hemos abandonado otras teorías –la comunicación humana, el lenguaje, la posmodernidad, etc.- y referencias que han informado oportunamente los desarrollos más recientes del enfoque sistémico, que si bien fue inicialmente informado por la Teoría de Von Bertalanfly, ha ido complejizándose sustancialmente con otras fuentes metateóricas como los textos de Wittgenstein, Gregory Bateson, Michel Foucault, Felix Guattari, Gilles Deleuze, Jacques Derrida, Richard Rorty y otros más que ahora olvido. El enfoque ha tenido siempre apertura hacia otras fuentes surgidas de la filosofía, la antropología, la epistemología y la literatura, teniendo siempre como unidad de análisis y referencia la relación y una postura crítica frente a las aventuras de la modernidad.
La historia de la Terapia Familiar no representa la historia del enfoque sistémico. Las referencias a lo sistémico-familiar algunas veces dejan fuera lo que corresponde al enfoque sistémico. Ambas contienen una serie de elementos comunes -por obvias razones- que destacaron siempre una apertura que permitieron a la Psicología y la Psicoterapia alejarse de la medicina y la biología como referencias obligadas.
Fuente: El Terapeuta Estúpido
No hay comentarios:
Publicar un comentario